* Ayer usaron a la ASEY, hoy usan a la Fiscalía. «Mérida no lo merece y lastima el prestigio de nuestra ciudad, considera.
«Estamos en contra del uso político de las instituciones», reiteró esta mañana el presidente estatal del Partido Acción Nacional, Edgar Ramírez Pech, al acompañar a funcionarios del Ayuntamiento de Mérida que fueron citados a declarar a ala Fiscalía.
«Este es un nuevo episodio de la guerra sucia con la que pretenden ensuciar el nombre de Mérida y de Yucatán», añadió. «Las autoridades que se supone deben buscar la justicia retomaron un caso antiguo y lo desempolvaron para usarlo como arma política en estas elecciones».
El dirigente panista señaló que estos hechos atípicos son reflejo de la desesperación del gobierno del Estado y del PRI, al ver el pobre desempeño de su candidato la gubernatura, Mauricio Sahuí Rivero. «Las encuestas lo confirman: Sahuí Rivero no levanta, y cada vez se encuentra más cerca del tercer lugar que del primero».
Para Ramírez Pech, esta comparecencia encaja con otras acciones, como el proceso relámpago con el que «la ASEY (Auditoría Superior del Estado de Yucatán) demuestra que se ha convertido en un brazo político más del PRI». El presidente estatal del PAN consideró que el auditor Mario Can Marín «tiene que darle muchas explicaciones a los yucatecos por prestarse a esta guerra sucia».
Acompañaron a los funcionarios municipales que declararon ciudadanos que repudiaron el uso político electoral de las instituciones. Ramírez Pech aseguró que el PAN los respalda y los arropa, toda vez que son víctimas colaterales de una campaña con fines mezquinos.